Los Sistemas de Información Geográfica (SIG) son una herramienta que nos permiten tener un mayor conocimiento sobre el territorio, ayudan a mejorar la gestión de una región y de sus recursos y posibilitan la realización de análisis complejos sobre multitud de parámetros del territorio. Todas estas ventajas de los SIG hacen que el empleo de esta tecnología en los proyectos de cooperación al desarrollo cobre una vital importancia.
Pero como toda tecnología que se transfiere Norte-Sur, hay que prestar especial atención en como se realiza. Existe para ello el concepto de tecnología apropiada, que no tiene una definición como tal, ya que es un concepto relativo, una tecnología puede ser adecuada en un lugar concreto, pero puede no serlo en otro. Sin embargo si existen unas características que una determinada tecnología debe cumplir para considerarse apropiada:
- Respetar las tradiciones y la cultura local.
- Respetar el medioambiente y ser sostenibles.
- Sostenibilidad social, los receptores de la tecnología deben ser capaces de mantenerla y deben tener los conocimientos necesarios para hacerlo.
- Fomentar la participación de las comunidades locales en la aplicación de la tecnología.
Si nos centramos en el caso de los sistemas de información geográfica, vemos fácilmente que cualquier SIG libre, como es el caso de gvSIG, cumple todas y cada una de éstas características, ya que el software libre es en sí mismo una tecnología apropiada. Puede ser adaptado a las particularidades culturales de cualquier región, además de a su idioma, mediante procesos de localización. Es sostenible, ya que las 4 libertades garantizan que cualquiera tenga acceso a los conocimientos necesarios para mantener la tecnología. Fomenta la participación, ya que el desarrollo en los proyectos de software libre se hace involucrando a los usuarios.
Por estos mismos motivos, los sistemas propietarios o privativos no pueden ser considerados una tecnología apropiada a pesar de que en ciertas situaciones su coste sea cero, y es que no todo vale en cooperación.
Cuando se alfabetiza tecnológicamente una región se tiene una responsabilidad muy grande sobre la tecnología que se introduce, y además de ser ésta una tecnología apropiada hay que garantizar que no se crea ninguna dependencia sobre ella.
Totalmente de acuerdo. Y aunque no lo citas, desde Cartolab/iCarto habéis predicado con el ejemplo en varios proyectos, de los que han resultado aplicaciones como gvSIG Fonsagua o Navtable.
Usando software privativo, lo que hacemos es algo tan simple como propagar dependencia tecnológica, que si es grave en cualquier caso más aún en este tipo de proyectos. De hecho, eso del coste cero del software privativo es sólo una artimaña más de las multinacionales de turno que quieren mantener el monopolio del conocimiento sea como fuere y en la que no deberían caer las organizaciones dedicadas a la cooperación. No es la primera vez que inundan un país/región con licencias “gratis”, para pasar a cobrar mantenimientos/actualizaciones en años posteriores. La verdad es que es muy triste que lleguen a estos niveles de maquiavelismo, pero es la realidad a la que nos enfrentamos.
Lo que no sé, y ya que estás metido en estos temas te pregunto, es si a nivel ministerial, europeo o de otro tipo hay recomendaciones al respecto -al menos cuando se da financiación pública para este tipo de proyectos-.
Pingback: Tweets that mention SIG y Cooperación | gvSIG blog -- Topsy.com
Hasta donde yo sé no hay recomendaciones en este sentido. De hecho en los proyectos de cooperación sí se suelen tener en cuenta otros factores, como el medioambiental o políticas de género, sin embargo nunca se valora el impacto que puede tener la introducción de un determinado software.
La elección de éste va a repercutir directamente sobre otras partes del proyecto, el coste en caso de que haya que pagar licencias, el hardware necesario, la formación que será necesario impartir y las dependencias tecnológicas que el software pueda crear, a nivel de la formación adquirida y de los formatos de información.
Van a tener en cuenta de si hay que pagar licencias pero no si es Software Libre o no. Se ve que los que hacen las recomendaciones no conocen el famoso proverbio chino:
“Dame un pez y cenaré esta noche, enséñame a pescar y cenaré siempre.”
Cuando he hablado con gente dedicada al tema de cooperación al desarrollo, siempre me han transmitido la misma idea. Lo más complicado es que ocurre “el día después”. Y ese día es el posterior al que acaba el proyecto y los cooperantes desaparecen y también los recursos adicionales. De hecho, el éxito de un proyecto depende en gran parte de lo que ocurre a partir de ese día después.
En tema de software -al menos- esos recursos no desaparecen, pues existen unos derechos de uso, estudio, mejora y redistribución que garantizan en gran medida la apropiación tecnológica.
Desde luego es un tema que se debería tener en cuenta y me temo que en muchos casos lo que puede haber es un gran desconocimiento de la importancia de usar software libre.
Si bien es cierto lo que comenta Pablo de que el software se debería considerar un aspecto transversal al proyecto, también lo es que existen factores importantes que complican su implantación:
En general, el coste del software es cero debido a la ilegal copia pirata (con lo que no afecta uno de los principales incentivos para el uso de software libre). Para una reflexión más profunda sobre ésto, conviene no olvidar que esto es aún una práctica habitual entre las ONG (tanto norte como sur).
La formación de técnicos en soluciones muy concretas como éstas es escasa y, además, tiene el riesgo de “la fuga de cerebros” (técnicos que, una vez formados, se van a otras zonas más desarrolladas a ganarse la vida).
De cualquier manera, en lo que respecta al uso y difusión de software libre, no haría muchas diferencias norte-sur. Podríamos sorprendernos de la ventaja que nos llevan.
mmm, parece que las etiquetas HTML que puse a mi comentario no le gustaron mucho al wordpress. Bueno, simplemente ponía un enlace a este artículo http://www.cuadernos.tpdh.org/articulo.php?id=93
I feel so much happier now I unesrdtand all this. Thanks!
Totalmente de acuerdo con lo que apuntas, de hecho creo que es un problema de base y no sólo de los financiadores de los proyectos. La mayoría de las ONG no tienen definida una política en cuanto al software, como sí la tienen en otras aspectos. Al final, en los proyectos, los técnicos suelen emplear el software que conocen , porque es lo que han aprendido.
Espero y deseo que poco a poco las ONG se vayan posicionando en cuánto al uso de software libre del mismo modo que lo hacen en temas medioambientales por ejemplo.
Cuando hablamos de las relaciones norte-sur, creo que se puede afirmar que gran parte de los problemas del sur vienen determinados por la dependencia que tienen del norte. A nadie se le escapa por ejemplo que de manera mayoritaria los recursos naturales del sur son explotados por el norte y que la mayoría de las políticas del norte van orientadas a someter el sur.
En este caso, sobre la utilización de sw privativo a coste cero, ya no es el hecho de que si es pirata es un delito, es el hecho de que aunque las compañías privativas regalaran la licencia, estaríamos propagando dependencia tecnológica. Estaríamos hablando de proyectos de cooperación para la sumisión tecnológica del sur…..creo que este punto también puede ser para la reflexión.
Ah..y si las compañías privativas regalaran las licencias a coste cero ¿Alguien piensa que estarían movidas por intereses filantrópicos?
Hace poco leí en algún lado que a estos “procedimientos” le denominaban “economía de colador”. Se “aportan” unos recursos desde países del denominado primer mundo que no repercuten en la economía del país, sino que esos recursos se cuelan y retornan al país de origen…y más que resolviendo, acrecentando en más de una ocasión el problema.
En el caso de las licencias se ve claramente. Las licencias a coste cero van a parar a organismos que pasan a depender de las políticas de multinacionales del software. No se queda en el país conocimiento, no se genera independencia.
Por esto es fundamental que como dice Pablo las ONG se vayan mentalizando de la importancia de usar software libre.
Acaba de salir un libro sobre esto: http://www.arnalich.com/es/sigco.html
Sobre las relaciones Norte-Sur no me atrevo a decir mucho, creo que podría dar para otro blog enterito 🙂 La verdad es que el mundo de la cooperación es complejo y tiene herramientas tan mezquinas como las que comenta Álvaro. Un ejemplo de ellas son los créditos ligados a compras a empresas españolas, créditos FAD: http://www.elmundo.es/elmundo/2004/10/26/solidaridad/1098800656.html
Por centrar de nuevo el tema en el uso de sofware en proyectos de cooperación. Si bien es cierto que la transferencia tecnológica norte-sur es muy potente, también lo es que muchas veces el modelo de colaboración es: las ONG del norte aportan tecnología -o lo que ellas creen que es tecnología- y las del Sur ponen conocimiento local. Es por ello que las ONG del norte muchas veces actúan como “comerciales de grandes empresas”, porque siguen teniendo la sartén por el mango.
Lo que no he visto todavía en proyectos de cooperación que tengan que ver con software, es un modelo de colaboración donde en el sur exista también una contraparte que desarrolle sobre el producto final. Es decir, un modelo “join venture”. Para mí, ésa es la clave de la transferencia tecnológica y de la sostenibilidad del proyecto de software: que cuando la ONG del norte se vaya, existan personas en el sur que sepan cómo tocar el código. Eso sí sería un modelo potente de transferencia tecnológica!
No debemos perder de visa que la verdadera transferencia e independencia tecnológica tiene que ver con las capacidades y el conocimiento, no con tener o no instalada una herramienta concreta. Que la solución elegida sea software libre es muy importante porque éste es un facilitador, pero no la transferencia en sí misma.
Estoy completamente de acuerdo con las aportaciones de Andrés.
En cuanto a la transferencia tecnológica, no podemos quedarnos en Norte-Sur, porque también hay transferencia Norte-Norte, Sur-Sur y Sur-Norte. La plataforma de Ushahidi es un buen ejemplo de desarrollo de software libre y transferencia tecnológica Sur-Sur y Sur-Norte: http://www.ushahidi.com/
Evidentemente el Software Libre favorece la transferencia tecnológica, pero el Software Libre no implica transferencia tecnológica si no se trabaja bien.
A nivel de usuarios/as: en caso de desarrollos personalizados es vital su implicación en el análisis de requisitos y toma de decisiones (porque sino el producto no cumplirá sus expectativas y no será utilizado). Además la capacitación sobre el uso y manejo del software, así como el soporte posterior a finalizar el desarrollo son otros factores claves.
A nivel de programación: coincido plenamente con lo aportado por Andrés de crear capacidades locales en esta línea, de forma que se garantice la sostenibilidad del producto.
Hola
Estoy totalmente de acuerdo cuando Carmen dice:
Esta reflexión de Carmen con la que repito, estoy totalmente de acuerdo, me viene muy bien para reflexionar con lo que ocurre si lo que se utiliza es Sw Privativo.
En mi opinión si lo que se utiliza es Sw Privativo, la transferencia tecnológica es simplemente imposible o dicho de otra manera, en la parte tecnológica se está convirtiendo la colaboración en sumisión.
Se puede pensar, pero si el objetivo es abrir pozos de agua potable, por poner un ejemplo, que más da la tecnología, lo importante es que se abran los pozos.
En este caso lo que me preocupa es cuando he leído muy a la ligera declaraciones de responsables de políticas de colaboración en ONU u organizaciones similares que dicen cosas como la que voy a comentar a continuación.
En el número 8 de los cuadernos internacionales de tecnología para el desarrollo humano, fecha febrero 2009, se recoge una entrevista de Carol Puig, Alberto Varela y Marc Pérez a Francisco J. Igualada. Director del Centro de Geoinformación de la United Nations Logistic (UNLB) en Brindisi (Italia).
Pues bien el titular de la entrevista es:
“No utilizamos software libre. […] desde un punto de vista práctico nosotros tenemos que producir; no podemos jugar con las vidas humanas”.
Más adelante cuando habla de Sw dicen que tiene licencias, que trabajan con ESRI, Erdas y Google y cuando le preguntan sobre el Sw Libre contesta de forma rotunda que no utilizan Software Libre, que sabe que hay ‘abogados’ del Sw libre y que no está ni a favor ni en contra, pero que desde un punto de vista práctico tienen que producir y no pueden jugar con las vidas humanas. Que por ejemplo, si su tiempo es oro y que se traduce en ayuda o no, tienen que utilizar el software que exista de la mejor manera…luego sigue con su particular FUD de no inventar la rueda porque ya todo está inventado etc.
Bueno, menos mal que no está a favor ni en contra (según él dice) porque si llega a estar en contra decreta una orden de búsqueda y captura contra el Software Libre. Por cierto, ni el mismo señor de ESRI habría defendido tan bien sus intereses creando opinión de la forma tan demagógica como hace el señor Igualada, porque esas cosas de dejar caer que no pueden utilizar SW Libre por su responsabilidad en la defensa de las vidas humanas, a mi sinceramente me entristece a la vez que me produce nauseas.
Entonces si este señor que representa a la ONU habla con esta contundencia, con esa misma contundencia diría yo.
Que el Sw Libre no garantiza la Transferencia Tecnológica si los procedimientos no se realizan de forma correcta.
Que el Sw Privativo sigue condenando a la sumisión. Que con el Sw Privativo la Colaboración es falaz.
Que si lo que hacemos es piratear licencias. Estamos ¿enseñando? a robar, a cometer nuevos delitos, pero que encima son delitos que van a servir para seguir sometiendo a los que en teoría queremos ayudar.
Que si las licencias las regalan las grandes transnacionales. Pues simplemente, no me creo sus ‘políticas de bondad ni su falsa filantropía’ Sus intereses son el de seguir cultivando las condiciones de monopolio tecnológico.
Que en el Siglo XXI no podemos obviar que el conocimiento de la tecnología es fundamental para que se den las condiciones de independencia y que si la tecnología no es accesible (Sw Privativo) la cooperación es una gran mentira.
Como bien dijo Andrés, el mundo de la Cooperación es muy complejo y hay que tener muchos más aspectos a tener en cuenta que en un proyecto “estandar” al realizar cualquier acción. Apetece comentar un montón de las cosas mencionadas, pero estoy en bastante sintonía con vosotros.
Por completar un poco el razonamiento y recogiendo el desafortunado comentario citado “No utilizamos software libre. […] desde un punto de vista práctico nosotros tenemos que producir; no podemos jugar con las vidas humanas” quiero decir que desde mi punto de vista no se usa FLOSS en el Sur para reducir costes, porque para su nivel tecnológico actual es suficiente, porque encaja filosóficamente y no genera dependencias (que también), sino porque ese software es de calidad. El software usado en Cooperación es un software en el que confiamos y con que trabajamos en el Norte.
El FLOSS es el tipo de software que creo mejor para mí, y tras estudiar todo el contexto, se concluye que encaja para el proyecto y se decide emplearlo para garantizar la calidad de los trabajos y además aprovechar la infinidad de ventajas que ofrece frente al software privativo. Con ese convencimiento creo que se debe plantear las elecciones tecnológicas. 🙂
He leído con atención este interesante post. Teniendo en cuenta que ya acumulo unos 5 años trabajando con SIG en proyectos de cooperación podría apuntar al debate:
– Software libre o privativo… no importa para el destinatario de la ayuda, lo que importa es si lo saben utilizar. Como comentan antes, la piratería reina y el factor coste no es problema. Se puede evangelizar en buenas prácticas, como “pirata = malo” y llegas e instalas el software libre sobre un Windows pirata, acompañado de un AutoCad Pirata y un Office Pirata… vale, tu parte está libre de pecado… pero sigue siendo razón insuficiente y créanme que en temas de cooperación se suma a las 4 características de la tecnología que apunta el post es el de “no hacer daño a la industria local”, desde lo que respecta al cooperante si debe ser este último un factor importante por que piratería es igual a hacer daño a empresas que viven de software privativo.
– Transferir mayores conocimientos: esto sobre los join venture que apuntan. Ok, depende del país, cuando en los avisos clasificados se solicitan directores de IT y el perfil es estudiante de ingeniería de tercer año, ya nos podemos hacer una idea de la escasez de talento… imaginen lo que significa buscar un buen programador o más bien, alguien que sepa programar en zonas rurales lejanas a las ciudades capitales…olvídenlo y agradezcan encontrar alguien que maneje con un nivel promedio un Excel.
– Enseñanza en el manejo de SIG es la clave: muchos proyectos gastan esfuerzos y dinero en cosas como estudios de riesgo, planificación territorial etc. Alguien apunta al día después que termina el proyecto y los cooperantes se van. Si señor, ese día se da uno cuenta si el esfuerzo valió la pena… si se dedicó gran parte del tiempo y del dinero a enseñar, seguro que si habrá luz al final del tunel. A la enseñanza se debe sumar de nuevo “depende del país”, la gente no lee igual en Colombia que en Costa Rica, ni en Costa rica igual que en Guatemala, ni Guatemala como Cuba, los niveles de escolaridad lamentablemente en zonas rurales puede ser desesperadamente bajo o puedes tener la suerte de encontrar algún autodidacta o alguien que “vio” algo de los SIG en la universidad. Evidentemente existen cursos sobre sig privativo a precios privativos para el público de la cooperación y una carencia enorme en cursos económicos y de calidad, he sabido de cursos de gvSIG de 1 día!, los que yo he dictado son de por lo menos 3 días para manejo básico.
…En que se puede mejorar:
– Estabilizar los productos es fundamental
– Generar material de enseñanza “for dummies”
– Vender la idea de invertir dinero y tiempo en capacitación…mucha capacitación
– Crear redes locales de aprendizaje, intercambio y apoyo
– Simplificar en vez de sofisticar… a veces se logran mejores cosas con un papel y lapiz que con un iPad + GPS.
… se me queda mucho por decir, pero creo q esto es lo más relevante.
Saludos
Hola,
Solo para comentar que a veces el SIG acaba siendo muy complicado para los profanos. En ese sentido hemos preparado un pequeño libro que explica como usar un GPS y crear mapas de Google Earth como estos: http://www.arnalich.com/es/goops.html
Una especie de hermano menor de un SIG que es mas que sufiente en muchos contextos de cooperación.